OPINIÓN: HUMANAGEMENT: Actitudes y valores en los nuevos líderes empresariales

Publicado el por N.B. / Violeta Costa (autor)

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Llevamos años hablando de crisis económica, financiera, de mercados, etc. y de las tremendas consecuencias que éstas están provocando en nuestra sociedad. Sin embargo,olvidamos mencionar el origen de todo ello, la clave sobre la cual, trabajando, podríamos, con seguridad, haber evitado gran parte del problema y el que es, sin duda alguna, el elemento clave para salir con éxito de la coyuntura actual: la crisis de valores.

Los modelos actuales ya no funcionan pero arrastramos una enorme inercia de inconformismo y comodidad que son los enemigos claros a la adaptación al cambio necesario en estos momentos. Como decía Charles Darwin, no es la especie más fuerte la que sobrevive, ni la más inteligente, sino la que responde mejor al cambio.

Muchos de los jóvenes que buscan empleo no están dispuestos al más mínimo sacrificio. Las personas que afortunadamente cuentan con empleo muerden la mano que les da de comer cuando en los descansos del café se amotinan y se crecen sobre todo aquello que “la empresa” parece hacer mal. Reducir plantilla en tiempos difíciles y trabajar más horas resulta un cuadro nada aceptado entre las personas dentro de una organización porque no existe una motivación que les empuje a valorar que sólo los mejores permanecen, y que por tanto cuentan con ellos para salir adelante. Un compromiso para con lo que hacen y representan. En definitiva, hablamos de una falta clara de ACTITUD seguramente promovido por una, hasta ahora, sobredosis de abundancia. Y no olvidemos que la actitud es el reflejo del liderazgo.

La empresa hace a la persona cuando debiera ser al revés. Sus líderes deberían inculcar valores que dotasen de una identidad propia a la compañía, siendo éstos transmitidos a todas las personas de la organización y sintiéndolos como suyos. Ese es el futuro, que las personas podamos decidir trabajar aquí o allí en función de los principios y de la visión que la empresa transmite a sus empleados y el bienestar social que aporta. Por ejemplo, cuando pensamos en cómo nos gustaría que fuese nuestro jefe o compañero de trabajo, lo primero que nos vienen a la cabeza serían seguramente actitudes que poco tienen que ver con el conocimiento.

La educación tiene un papel fundamental. Debemos volver al estudio de las humanidades. Ciencias, Matemáticas, Innovación, Tecnología etc. sí, pero sin dejar de lado lo que nos diferencia como personas y nos hace únicos; todos los valores que en un futuro marcarán nuestro rumbo.

Sabemos que todos los cambios relevantes en la historia no se han producido de un día para otro. Esto es una carrera a medio y largo plazo y por ello desde los colegios y universidades debemos trabajar para que las próximas generaciones accedan a la empresa con unos valores ya interiorizados y sean capaces no sólo de mantenerlos sino también de transmitirlos.

Teniendo en cuenta que un buen porcentaje de los directivos de las organizaciones que lideran y dirigen la economía de la sociedad cuentan en su C.V. con un MBA no cabe duda de que desde las Escuelas de Negocio se debe asumir la responsabilidad de formar a las personas según un modelo de liderazgo basado no únicamente en el conocimiento.

En la Escuela apostamos por este sistema de humanagement. Creemos en las personas y las formamos, no sólo en conocimientos y herramientas de gestión para su actividad, sino también en habilidades, actitudes y ética empresarial para generar un entorno de trabajo eficaz, productivo y comprometido con el bienestar social.

*Directora Sede Bilbao E.E.N.