Siempre nos quedará París

Publicado el por N.B. / DOROTA MASLANKA (autor)

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Kodak, la empresa pionera de la fotografía en general, ha “echado el cierre”. La noticia ha abierto telediarios, ha sido portada de revistas…
Sin embargo, el motivo principal de su situación no ha quedado claro. ¿Cómo es posible que la empresa que inventó la cámara digital haya sido devorada por ella?

Kodak, compañía histórica y legendaria donde las haya, se ha visto superada por la era digital. Por la competencia del mundo digital. Cuando el ingeniero estadounidense Steve Sasson, en 1975, inventó la primera cámara digital para la firma, poco podía imaginar que esta invención pondría en la cuerda floja al gigante de Nueva York. Y es que, el modo de gestionar las patentes de una empresa puede suponer el éxito o el fracaso de la misma. De una estrategia de propiedad industrial, puede depender que un nicho de mercado se desarrolle o pase a manos de la
competencia.

Kodak ha hecho un continuo esfuerzo por reinventarse y ha dado luz verde a miles de patentes. Inventó la película de papel en 1888 en sustitución de las placas de cristal de entonces, lanzó el carrete de celuloide… Sin embargo, es posible que diseñara una estrategia en el ámbito de la propiedad industrial que no se ha adecuado a sus necesidades. La propiedad industrial de una empresa permite aumentar la competitividad de ésta y sus beneficios, ya que se puede vender o licenciar. De este modo, es posible que Kodak hubiera sido más efectiva si hubiera gestionado las más de mil patentes que originó el invento de Sasson que haciendo uso de ellas. No obstante, el núcleo duro de la compañía reconoce el valor de su intangible.

De hecho, ha depositado en sus derechos de exclusividad parte de su última esperanza. Kodak, de manera simplificada y coloquial, tiene en marcha dos líneas de trabajo con sus invenciones como centro. Por un lado, está tratando de vender un paquete de patentes en el ámbito de la fotografía y rentabilizar así su propiedad industrial no estratégica. Según Antonio Pérez, uno de los máximos responsables de la firma, esto les dejaría con suficiente efectivo para poder financiar su recuperación. Por otro lado, Kodak ha pasado los dos últimos años recaudando fondos mediante la reclamación de sus licencias, mediante demandas por uso indebido de sus inventos registrados. Continúa con ello y recientemente ha demandado a Samsung por haber violado cinco de sus patentes en el Tablet Galaxy. También ha interpuesto una demanda contra Research in Motion (RIM), fabricante canadiense de los smartphones BlackBerry, y contra Apple y HTC por infringir patentes de imágenes digitales.

La compañía estadounidense, entre otras cosas y como ya hemos mencionado, busca, con este último tipo de acciones, una indemnización por daños. Pero… ¿no se tratará más bien de una estrategia para poder conseguir interesados en comprar su portfolio de patentes? ¿Y de una estrategia para aumentar el precio del mismo? Lo que sí queda claro es que las patentes eran algo estratégico para Kodak y que, de momento, sus dirigentes siguen confiando en ellas para salir de su situación; los analistas de Wall Street, también. Todos ellos coinciden en señalar que a Kodak le queda una opción: dejarse adquirir por un gigante tecnológico interesado en explotar sus patentes.
Siempre nos quedarán las patentes…

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