La mayoría de los y las economistas vascos valoran el Cupo y el Concierto económico como un sistema justo

Publicado el por N.B // REDACCIÓN (autor)

 (photo: )
  • El 86,4% de los y las economistas opina que el Sistema de Concierto y Cupo es un sistema justo de financiación
  • Un 58,1% de los y las economistas vascos considera adecuado implantar un sistema de renta universal como medida de lucha contra la pobreza
  • Esta es la tercera edición del Ekonometro, que se realiza semestralmente y que está impulsado por el Colegio Vasco de Economistas y la participación de la UPV/EHU

El Colegio Vasco de Economistas, mediante la participación de sus colegiados y colegiadas, ha presentado la tercera edición del Ekonometro. Este indicador pretende, mediante una encuesta coyuntural, recabar las opiniones que tienen los y las economistas de Euskadi en el contexto actual, así como las perspectivas de la empresa y economía en general de cara al futuro

En esta tercera ocasión se ha pedido a los y las economistas su opinión sobre el sistema de Concierto Económico vasco, la implantación de un modelo horario similar al de los países nórdicos, la aplicación de un sistema de renta universal o la supresión del uso del dinero en efectivo como medida en la lucha contra el fraude fiscal, entre otros.

La encuesta se ha realizado en diciembre de 2015, y en total, han sido 548 economistas colegiados y colegiadas de los tres Territorios Históricos de la Comunidad Autonómica Vasca los que han participado en la encuesta, lo que representa un 10,95 % del colectivo.

 

Entre quienes han participado, hay economistas en activo, empresariado y quienes trabajan por cuenta ajena, tanto del sector público como del sector privado, así como jubilados y en situación de desempleo. Este amplio abanico proporciona en su conjunto una visión completa e independiente de las cuestiones planteadas.

CONCLUSIONES

La opinión de los colegiados y colegiadas con respecto a la situación económica del País Vasco es positiva y creen que la recuperación económica se está produciendo a buen ritmo. El 41,9% de las y los economistas de Euskadi considera que la situación de la comunidad ha mejorado con respecto a los 6 meses anteriores, y solo un 6,7% considera que ha empeorado. No obstante, las expectativas mostradas en la pasada edición del Ekonometro, en la que el 62,1% de las y los economistas vaticinaban la mejoría de la economía, eran más elevadas que los resultados finales. Para mediados del 2016 el 50,5% de los y las economistas encuestados auguran una clara mejoría, mientras que únicamente un 5,8% considera que empeorará.

En cuanto a su situación personal, la mayoría de las y los economistas de los tres territorios considera que su situación económica no se ha visto alterada en los últimos seis meses, unos resultados que son peores que los que se mostraron en el Ekonometro de junio 2015, puesto que solamente en Gipuzkoa perciben que su situación económica ha mejorado por encima de la media de Euskadi.

A juicio de las y los economistas encuestados, los cuatro factores que más influyen en la competitividad de la economía vasca son: la I+D+I, el acceso a la financiación el nivel de consumo y la formación. Por otra parte, los costes salariales quedan relegados de entre los factores más influyentes en la competitividad de la economía vasca después de haberse convertido en un elemento de relevancia en el anterior Ekonometro.

El Ekonometro ha pedido la opinión  del colectivo de las y los economistas sobre el Sistema de Concierto y Cupo vasco. El 86,4% considera que se trata de un sistema justo de financiación, frente al 13,6% que no lo considera justo. Las y los encuestados también han sido cuestionados sobre si el actual cupo contribuye de manera adecuada a la solidaridad con el estado, a lo que el 69,9% ha respondido afirmativamente, un 17,5% cree que la contribución a la solidaridad es excesiva, mientras que el 12,6% restante la considera insuficiente.

El crecimiento de la pobreza y la exclusión social también han tenido un espacio en el Ekonometro de este año. Durante la pasada campaña electoral algunos partidos se han mostrado favorables a implantar un sistema de renta universal que garantice una cantidad que cubra las necesidades vitales de una persona como medida de lucha contra la pobreza. El 58,1% de las personas encuestadas estaría a favor de implantar un sistema de este tipo en España. Por perfil profesional, el colectivo de desempleados se muestra más favorable a la puesta en marcha de este sistema, con un 84% de apoyos, mientras que en el caso de los activos por cuenta ajena en el sector privado los encuestados a favor (53,4%) superan ligeramente a los que están en contra (46,6%). El mecanismo de financiación del sistema de renta universal que genera más aceptación de las y los economistas es la lucha más activa contra el fraude seguido del recorte de gastos en otras partidas. Por el contrario, aquellos mecanismos que suponen aumentos en la presión fiscal son los que menor aceptación despiertan.

Así mismo, se ha preguntado al colectivo sobre cómo afectaría la implantación de un modelo horario similar al de los países nórdicos a la productividad y la eficiencia del país. Un 77,2% de las personas encuestadas opina que un modelo de horario laboral regulado vía acuerdos sectoriales o convenios mejoraría la productividad de las y los trabajadores y la eficiencia de las empresas. Entre todos los encuestados solo un 8,1% estarían en contra de un modelo semejante. Además, son las mujeres quienes serían más partidarias de implantar un modelo de horario laboral similar al de los países nórdicos, el 84,4% frente al 73,1% de los hombres.

Por último, en esta edición del Ekonometro también se ha planteado una de las medidas que se valoran implantar en Dinamarca con el objetivo de reducir el fraude fiscal, la supresión del dinero en efectivo. La opinión mayoritaria de este colectivo es contraria a esta supresión, un total del 61,5% de las y los encuestados. Las diferencias de edad marcan distancias entre las respuestas de las y los colegiados; entre los jóvenes un 42% vería con buenos ojos esta medida, mientras que entre el colectivo de mayor edad solo un 25% sería favorable a esta medida.